"Todos somos frágiles y vulnerables; todos necesitamos esa atención compasiva, que sabe detenerse, acercarse, curar y levantar. La situación de los enfermos es, por tanto, una llamada que interrumpe la indiferencia y frena el paso de quienes avanzan como si no tuvieran hermanas y hermanos".
Papa Francisco

En respuesta a esta llamada, surge en nuestra Unidad Pastoral el grupo de Pastoral de la Salud. Formado por una veintena de personas —laicos, y religiosos, hombres y mujeres— este grupo tiene como objetivo conocer a todas las personas enfermas y ancianas que en nuestra comunidad necesitan compañía y apoyo.

Los miembros del grupo, después de conocer la situación de cada persona, ofrecen acompañarlas, visitándolas en sus domicilios o residencias. En ocasiones, son los familiares de los enfermos o los mayores los que los cuidan con amor y los acompañan incansablemente. A ellos también grupo de Pastoral de la Salud les ofrece su ayuda, prestándoles los servicios o ayudas que necesiten y deseen.

Cuidando la dimensión creyente de la vida de las personas enfermas y mayores, el grupo ofrece también administrar los sacramentos: la unción de enfermos, la confesión, la comunión.

Otro objetivo de la Pastoral de la Salud es recordar a la comunidad la existencia de los enfermos, la importancia que tienen para la misma comunidad, orar por ellos y ser sensibles a la realidad de la enfermedad y la vejez. Para ello hay dos fechas destacadas en el año. La primera es la Jornada Mundial del enfermo que se celebra diocesanamente el 11 de febrero. La segunda es la Pascua del Enfermo que se celebra el VI domingo de Pascua. Esta es una celebración más parroquial cuando se suele realizar la Unción de Enfermos comunitaria.

El grupo se reúne para formación, planificación y revisión cada dos o tres semanas y participa en las reuniones mensuales y actividades del equipo diocesano de Pastoral de la Salud.

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